Leif Ferreira, uno de los fundadores, explica que Bit2me nace con la intención de intentar facilitar el acceso al mundo de los activos digitales, ya que cuando la empresa vio la luz, la entrada en el universo cripto era “sumamente compleja, especialmente para alguien de España”. Con el paso de los años, en plena expansión de la empresa, se han ido añadiendo servicios como el monedero, la academia, conformando una plataforma de trading avanzada e incluso ofreciendo un informe de impuestos generado automáticamente para aclarar todo lo que el usuario necesite saber con respecto a sus inversiones en criptomonedas, debido en parte al gran desconocimiento de mucha gente con respecto a este tipo de activos.
En 2023, señala que la empresa contaba con cerca de un millón de usuarios, operando 2.700 millones de euros dentro de la plataforma. Según sus datos, el 80% de usuarios son de España, con el resto del porcentaje repartiéndose por el resto de Europa y América Latina.
Ferreira afirma que precisamente España es uno de los países de Europa donde más criptomonedas se utilizan; “La adopción de criptomonedas es mucho más alta que en otros países. Si, en cambio, calculamos cuál es el ticket medio de las personas que invierten en criptomonedas, España baja varias posiciones. El ticket medio no es tan alto como en otros países”.
Una de las patas que sostiene este proyecto es la transparencia: “La gente cuando utiliza una plataforma en la que se utiliza su dinero tiene que tener en cuenta varias cosas, como la localización del país a donde lo está enviando”. Aquí distingue entre dos grandes áreas, en función de si el país es un paraíso fiscal (casi toda la industria) o no. “En un país como España ya de por sí existe transparencia y una serie de regulaciones. Europa para el emprendedor puede ser dura, pero para el usuario es muy garantista”, algo que descartaría casos como el de FTX, uno de los más sonados.
En Bit2me intentan ir un paso más allá. “Metemos certificaciones ISO, o algunas que tienen que ver con compliance. Nos han premiado constantemente en cuanto a cumplimiento normativo. Además, ha invertido Telefónica, y ha participado BBVA”. Este tipo de compañía, asegura, tienen que auditar, lo que provoca que todo esté muy bien regulado. En este sentido, Bit2me, desde sus principios, adoptó una mentalidad proteccionista hacia el usuario, con el fin de evitar delitos que se pudieran cometer a través de la plataforma. “Uno de nuestros grandes aciertos fue empezar a contratar profesionales que venían de la parte de análisis de transacciones del sector bancario. Contamos con un departamento enorme de cumplimiento normativo”. La regulación aún puede ir a más con MiCA, un reglamento europeo que pretende fomentar el uso de tecnologías innovadoras estableciendo un marco regulador que abarque los cripto activos, sus emisores y los proveedores de dichos servicios.
Leif Ferreira considera más arriesgado estar fuera de Bitcoin que estar dentro, siendo una decisión particular el posicionamiento. “Recomiendo a toda persona que no conozca el funcionamiento de Bitcoin que lo estudie”.
No es desdeñable, además el pensamiento de que las criptomonedas pueden modificar el entorno financiero de los próximos años, ya que según explica, una de las cosas que Bitcoin puso sobre la mesa fue la posibilidad de “automatizar algunos procesos y hacerlos más eficientes, y si tienen los elementos tecnológicos necesarios, hasta se pueden coordinar entre ellos”, pudiendo incluso los Gobiernos utilizar la tecnología del blockchain, dada la transparencia que ofrece.