Tenemos un impacto muy claro en el corto plazo que es un aumento de la incertidumbre enorme. Eso es lo que están viviendo hoy los mercados financieros. Las bolsas, los mercados de cambio, que están actuando salvajemente. Está también la renta fija. No olvidemos que el BCE está comprando y sin embargo la prima de riesgo española se ha aupado hasta los 180 prácticamente con unas selecciones que tenemos que celebrar. En el medio plazo puede haber una ralentización de la economía a nivel mundial porque esa incertidumbre traspasa del sistema financiero a la economía real. Eso lo podemos ver en el precio del petróleo, que ha empezado con un desplome del 1,5%, pero según ha transcurrido el día ha ido aumentando. Eso se traslada a la economía real del mundo. A partir de ahí empezamos a tener los graves problemas de estancamiento o menor crecimiento y luego más a largo plazo es el político. Qué ocurre con Irlanda, con Escocia, en Francia, en Austria, o países como Bélgica, España e Italia etc. Es una cuestión muy importante y de mucha incertidumbre. Creo que no vamos a ver una Unión Europea como la tenemos, pero pueden ocurrir dos cosas: que las personas y los países al ver las consecuencias de la salida del Reino Unido vean que la UE es necesaria y la fortalezcan aún más. Es decir, un presupuesto fiscal común, un tesoro público común (Eurobonos) etc. Más Europa y fortaleza. O bien, que salte por los aires. Si esto pasa está el euro y volver hacia atrás a un país como España tendría unas enormes consecuencias como la inflación.
Uno de los sectores más castigados con el Brexit es el financiero. Lo vemos con caídas de muchos de los bancos de en torno al 20%. ¿De qué forma va a afectar en el sector bancario a medio plazo?
En el caso de nuestro mercado tenemos muchas cotizadas con exposición a Reino Unido como Santander, Iberdrola, Telefónica, Ferrovial o Mapfre, que ya descuentan hoy desplomes masivos. ¿Les queda mucho por sufrir a estas compañías?
A estas compañías les queda por sufrir hasta que la libra se estabilice. Es cierto que están haciendo de colchón el Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo, pero aún así habrá que verlo. Está claro que seguro que hay mucho inglés sacando libras fuera del país. Esto va a continuar. En segundo lugar, una vez que pase lo de la libra, tendremos que pensar que a un Banco de Santander su materia prima no se le encarece, pero las libras que repatría hacia acá son menos euros. Luego Ferrovial, ACS o Iberdrola, por ejemplo, se verá al medio plazo cuando empecemos a hablar de crecimientos del PIB. De todas formas todo parece indicar en estos momentos que ahora mismo Reino Unido se va hacia una inflación y a un estancamiento económico. Eso es una situación de estanflación que a los economistas no nos gusta nada.
Muchos analistas comentaban que incluso el centro financiero de Europa podría trasladarse de Londres a Dublín o Frankfurt. De hecho, bancos como JP Morgan o Goldman Sachs ya avisaron que saldrían del Reino Unido en caso de que se produjera el Brexit. ¿Considera que este tipo de situaciones se van a producir?
Creo que no lo vamos a ver de una forma inmediata pero en el medio y largo plazo, si no hay más estallidos en la Unión Europea, sí vamos a ver esas salidas. No sabemos dónde. Lo que ya no tiene sentido es que en un país que tiene que hacer tratados para todos no tiene mucho sentido que sea en un país que está fuera de la UE.
¿Cuáles son los activos que pueden actuar como refugio ante esta circunstancia? ¿Cuál es la mayor recomendación posible?
El oro, sin duda. Ahora mismo para una persona que nos esté viendo y que esté pensando que esto va a tener un impacto muy negativo sobre la economía y que va a tener grandes incertidumbres: el oro. De hecho el oro está subiendo prácticamente lo mismo que cae la libra. Eso significa que hay muchos inversores que están comprando oro. Entonces el oro ahora mismo es lo más seguro. Un bono alemán ahora mismo lo compro a pérdidas. Eso es muy duro. Sé que estoy en un activo que voy a perder si lo dejo a vencimiento. En el tema de bolsas hay mucha incertidumbre y como los financieros continúen afectados, va a afectar a la economía real. En España lo podemos cuantificar según las primeras estimaciones entre el 0,3% y el 0,5% de menor crecimiento para el PIB, lo cual nos mete en un problema de déficit público. Todas esas incertidumbres son las que terminan llegando a las personas de la calle.
¿Los tipos de interés probablemente ya no se toquen en lo que queda de año viendo todo este pánico?
Los tipos de interés en Estados Unidos no se van a tocar. Después de la tormenta que hay no se puede. Con la que está cayendo si los precios del petróleo caen más le va a preocupar mucho por la inestabilidad de Latinoamérica y de su propio mercado de fracking. No soy muy prodólar. Creo que el euro se puede revalorizar frente al dólar si Europa cierra filas. En este momento no es el escenario más probable. Luego está el factor de Trump, que no gusta nada a los mercados y es muy populista. Se sale de los parámetros convencionales de la economía, muy proteccionista etc. Entonces, por eso a mí el dólar me cuesta verlo.
¿Qué actuaciones podemos ver por parte de los bancos centrales? ¿Habrá coordinación?
Ya se ha creado una coordinación enorme para surtir a los mercados de liquidez y a partir de ahí podemos ver que la FED no subirá tipos y será muy laza y blandita con otro enfoque. Eso es un grado de preocupación. Eso significa que si Estados Unidos tiene problemas la Reserva Federal no tiene margen para disparar. Por parte del BoE, probablemente veamos tipos negativos, también probablemente contemple alguna compra de activos. Por parte del BCE puede que tengamos más tipos negativos y habrá que ver si en octubre o noviembre el QE se amplía en más campos, duración y cantidad. El BoJ ya no puede hacer mucho más. Queda por ver el Banco Popular Chino, que es el otro gran banco. A China esto entre comillas no le viene nada bien porque está apostando por su demanda privada, pero no puede dejar que le caiga la demanda exterior. Ahí hay otra pieza que ya es un jugador básico y estelar.