Era condición necesaria, pero no sabemos si suficiente. IAG (Iberia) cotiza en el mercado más de 4,97 millones de acciones frente a las 1,99 millones al cierre del pasado ejercicio y vale algo más de 8.400 millones menos. Es el resultado del impacto de la pandemia en bolsa para el consorcio de aerolíneas que encabezan British Airways e Iberia pero que a la postre, pone en orden y ajusta el balance de la compañía dentro y fuera del mercado. Lo último, los cambios en su cúpula tras la llegada de Luis Gallego a lo más alto de la compañía, con la salida de Alex Cruz desde su puesto de CEO de British Airways para ocupar la presidencia no ejecutiva. 

Una dilución efectiva para los accionistas, si es que no han acudido a la ampliación que ha tenido una gran acogida en el mercado. Sin embargo, tras cerrar con éxito la   operación , ahora lo importante es el futuro. Qué pasará con la compañía y por ende, cuál será su comportamiento bursátil. 

Lo primero hay que mirar a lo inmediato: IAG sigue siendo el gran farolillo rojo de un Ibex 35 con caídas acumuladas que rondan el 76% en el año a pesar de la recuperación que está experimentando el valor desde sus mínimos de 0,977 euros por acción. Esta semana, en la que han empezado a cotizar los nuevos títulos, el avance acumulado supera el 14%. Aunque lo cierto es que si miramos más allá, a los últimos 20 días, el valor ha caído en su cotización nada menos que un 22%.

 

 

Pero los expertos consideran que el valor ha podido ya tocar fondo, y no olvidemos, que los analistas siguen otorgándole un potencial envidiable: tanto es así que hasta Citi señala que, si se dan las condiciones adecuadas, podría revalorizarse un 100%. Y en general el consenso del mercado eleva hasta el 84% ese potencial del valor. Y será crucial a partir de ahora el devenir que marque tanto su sector como el del turismo en general: y parece que todo se fía a la llegada de la vacuna que nos devolverá movilidad. 

Más pequeña, con recorte de costes y de rutas, con ERTE en vigor y ayudas públicas en los países en los que opera que ya suponen, de España, Reino Unido e Irlanda, más de 230 millones de euros. Así será en los próximos tiempos IAG. Una recuperación que se espera sea lenta en función de cómo vaya evolucionando la pandemia para un sector que de momento no se espera que vuelva a donde estaba hasta al menos 2022. 

Por tanto, ¿considera que IAG ya ha tocado fondo y a partir de ahora su potencial será realidad mientras mejore la evolución del coronavirus y se despejen incertidumbres? O por el contrario ¿Cree que la persistencia de la pandemia en todo el mundo obligará a las aerolíneas a mantenerse en un plano lateral antes de que la situación mejore? ¿Podría ayudar al avance de su cotización las ayudas que quiere establecer Donald Trump para reactivar el sector y las futuras ayudas públicas europeas?

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