Después de los problemas acarreados tras el rescate del Banco Espírito Santo para empresas importantes del país vecino, como Portugal Telecom, ahora el Benfica también sufrirá las consecuencias de la caída de este banco.

El mayor problema del club, el más laureado de Portugal, es que pierde una de sus más importantes vías de financiación. La caída del tercer mayor banco de Portugal dejará al Benfica con un serio problema de liquidez, después de que el año pasado consiguieran un préstamo por valor de 65 millones de euros.

Este préstamo vencía en abril de 2014, aunque se renueva automáticamente por periodos trimestrales, pero con la nueva administración aun no se conoce cómo se refinanciará la deuda. De hecho, es posible que el club tenga que deshacerse de alguna de sus estrellas para poder disponer de liquidez suficiente para pagar el préstamo.

Durante la temporada pasada, que finalizó en junio, el Benfica realizó traspasos que le reportaron 50 millones de euros, con lo que podría disponer de efectivo. Sin embargo, las salidas no han sido suplidas con nuevos refuerzos, por lo que el rendimiento del equipo, reciente campeón de la Supercopa portuguesa, puede verse seriamente afectado.

BUENAS NOTICIAS A PESAR DE TODO

La buena noticia para el club, que cotiza en la Bolsa de Lisboa, es que seguirá manteniendo una de sus mayores fuentes de ingresos, el Benfica Stars Fund. Este fondo de inversión, ha recaudado unos 45 millones de euros desde 2009 vendiendo porcentajes en los traspasos de futbolistas del propio club que buscan beneficiarse de una futura revalorización.

Después de la insólita medida de dividir al BES en un banco 'bueno' y otro 'malo', este fondo gestionado por el ESAF (Espírito Santo Fundos de Investimento Mobiliário) y por el club, no irá a parar al 'Banco Malo' y sí a la parte "buena" incluida en el Novo Banco.