Una operación que, tal y como comenta el consejero delegado de la firma, Pere Viñolas, se realiza en un momento en que los fundamentales de la compañía son muy sólidos. El volumen de contratación de alquiler está siendo muy fuerte en los tres mercados donde opera Colonial y, con una ocupación plena que presentan sus activos, está permitiendo capturar el ciclo alcista de las rentas. Tal y como dice la nota de prensa, “los nuevos contratos firmados se están revisando al alza, con importantes crecimientos de la renta de alquiler respecto a la renta del mercado”. Asimismo, el elevado interés inversor en activos prime, permite esperar revalorizaciones positivas en la cartera de Colonial en próximos meses.
La compañía afronta la recompra de acciones con una robusta estructura de capital. El LTV (Loan to Value) de la compañía se sitúa en un 34% después de la venta de In&Out. Por otro lado, la liquidez del grupo se sitúa por encima de los 1.800 millones de euros, con un vencimiento promedio de la deuda financiera superior a los 4,5 años.
La compañía recuerda que “la agencia de calificación Standard & Poor’s revisó en abril de este año el rating de Colonial al alza y actualmente le otorga una calificación de BBB con perspectiva estable. La semana pasada, esta misma agencia publicó un informe en el que destacaba el buen posicionamiento debido a “la diversificación geográfica” de sus activos. Por su parte, la agencia Moody’s, cuya calificación para Colonial es Baa2 con perspectiva estable, abordó también recientemente en un informe el posible impacto de la situación política en España sobre el rating de Colonial y en la que constataba el carácter defensivo de su cartera de activos prime”.
Por otro lado, la exitosa ejecución de la estrategia de crecimiento del Grupo Colonial basa en un enfoque industrial combinado con un posicionamiento de especialización en oficinas prima en los mercados de Barcelona, Madrid y París, está teniendo el respaldo del mercado de capitales. De hecho, diferentes analistas nacionales e internacionales han otorgado un precio objetivo sustancialmente superior a la cotización de la acción de Colonial a cierre de mercado. El consenso de analistas estiman un precio objetivo para la inmobiliaria de 8,84 euros, lo que supondría añadir en torno a un 10% a la subida que acumula el valor en lo que llevamos de ejercicio, en torno a un 20%. Por encima del Ibex35 y el índice EPRA.