Caterpillar sorprendió al consenso de analistas con sus cuentas trimestrales. En gran medida se debe que ha logrado compensar la debilidad de sus ingresos con la reducción del gasto, lo que ha llevado a que su balance se haya equilibrado. En este sentido, la compañía obtuvo un beneficio de 1.000 millones de dólares, o 1,54 dólares por acción, en comparación a los 697 millones de dólares del mismo periodo en 2012.

Estas cuentas han superado a las estimaciones de los analistas que habían pronosticado una ganancia neta de 1,28 dólares por título. Sin embargo, las ventas de la empresa descendieron un 10% con respecto a hace 12 meses hasta 13.600 millones de dólares
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En un comunicado, Doug Oberhelman, CEO de Caterpillar, afirmó que la compañía estaba empezando a ver "algunos signos de mejora en la economía mundial, lo que debería ser positivo para las ventas" en el futuro.

El optimismo de Oberhelman se extiende a los mercados emergentes, una fuente de preocupación de los inversores en las últimas semanas. El directivo no cree que los acontecimientos actuales vaya a influir en sus resultados de este ejercicio.

Además, la firma con sede en Peoria (Illinois), hizo una revisión sobre sus previsiones de beneficio para el conjunto de 2014 hasta llegar a 5,85 dólares por acción, excluyendo extraordinarios. Aún así, espera que sus clientes mineros continúen reduciendo sus inversiones en nuevos equipos en el próximo año. En los últimos años, el sector ha sido uno de los más rentables de la compañía.

En este sentido, los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión muestran que Caterpillar se encuentra en fase alcista, mientras que recibe una puntuación de 8 puntos en una escala que oscila del 0 al 10.

Este análisis técnico pone de manifiesto que tanto la tendencia a medio como a largo plazo es alcista. Asimismo, la volatilidad es decreciente. Por el contrario, el único punto negativo que señalan estos indicadores es que el volumen en el valor es decreciente a medio y largo plazo.