El problema se llama 3,8 euros y de no conseguir un ataque victorioso a ellos el valor se quedaría atrapado en un pequeño rango del que podría salir por cualquiera de los dos lados. Así, que podemos plantearnos una doble estrategia acorde a lo que vaya a ocurrir:
Si el valor consigue romper al alza los 3,8 euros entonces tenemos camino libre para seguir escalando posiciones hasta los 3,97 euros donde se encuentran importantes medias móviles y en caso de ruptura ver una continuidad hasta los máximos anuales en torno a los 4,35 euros. Todo ello, protegiendo la posición con un stop de pérdidas inicial en los 3,70 euros.
Por el contrario, si Caixabank no puede hacerse con los 3,80 euros y termina perdiendo los 3,60 euros, entonces tendríamos la posibilidad de ver una corrección hasta los 3,40 euros que aprovecharíamos con un stop de pérdidas inicial en los 3,70 euros.