Caixabank ha presentado su nuevo Plan Estratégico 2025-2027 con el objetivo de mantener unos niveles de rentabilidad sostenible superiores al 15% (ROTE) para potenciar el crecimiento del crédito a empresas y familias, que se espera que crezca el 4% anual en los próximos tres años. El sostenimiento de dicha rentabilidad permitirá a CaixaBank seguir “remunerando adecuadamente” a sus 558.000 accionistas, incluyendo al FROB y a la Fundación “la Caixa”, para que siga desarrollando su Obra Social.
Para ello, el Grupo cuenta con tres pilares estratégicos: acelerar el crecimiento, impulsar la transformación y la inversión en el negocio, y consolidar la posición como referente en sostenibilidad, explica en un comunicado.
El consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ha afirmado que “en estos próximos tres años queremos aprovechar un entorno económico previsiblemente más favorable para dar un salto adelante en nuestra calidad de servicio, nuestras capacidades tecnológicas y en el desarrollo del talento de nuestra plantilla. Todo ello redundará en mayor crecimiento de la economía y una adecuada remuneración para nuestros accionistas”.
Principales indicadores financieros
Con el nuevo Plan Estratégico 2025-2027, el Grupo aspira a mantener estable el margen de intereses al final del periodo, en un entorno propicio que apalanca buena parte de las oportunidades de crecimiento, aunque en un escenario de reducción de los tipos de interés. Además, se prevé un incremento moderado de los ingresos por servicios -en el rango medio de un solo dígito- mientras que los costes se espera que crezcan alrededor del 4% TACC (tasa anual de crecimiento compuesto).
La fortaleza financiera, que ha marcado los últimos tres años, continuará a futuro con un objetivo de alcanzar una rentabilidad ROTE de más del 16% a cierre de 2027 y que el promedio en 2025-2027 sea superior al 15%. Asimismo, la ratio de eficiencia se situaría ligeramente por encima del 40% y la tasa de morosidad se prevé que baje hasta alrededor del 2%.
CaixaBank seguirá también generando capital de manera orgánica y recurrente, y la liquidez se mantendrá en niveles elevados cumpliendo con holgura los mínimos regulatorios exigidos.
En cuanto a la política de retribución al accionista, el nuevo Plan Estratégico recoge el compromiso de repartir en dividendos entre el 50% y el 60% del beneficio neto consolidado, con un dividendo a cuenta cada año, y distribuir el exceso de capital CET1 por encima del 12,5%.
Caixabank inicia una nueva etapa después de cerrar con éxito el Plan Estratégico 2022-2024, en el que ha cumplido los objetivos financieros y cualitativos fijados para el periodo 2022-2024. Se han superado, entre otros, los de rentabilidad, eficiencia y morosidad, además de crecer en cuotas de mercado en los principales negocios y promover la inclusión social y financiera. Por otra parte, en este periodo, el negocio internacional ha aumentado por encima de lo proyectado y la movilización de finanzas sostenibles ha batido holgadamente la meta de los 64.000 millones.
La capacidad de distribución al accionista también ha superado ampliamente el reto inicial de 9.000 millones de euros -ya hay asignados un total de cerca de 9.500 millones- con un compromiso de alcanzar los 12.000 millones en el marco del Plan Estratégico 2022-2024.