A largo plazo está claro, la compañía que mejor se comporta es Barón de Ley, que se aprecia más de un 130% en los últimos diez años. La bodeguera es una de las pequeñas cotizadas españolas que están casi siempre presentes en las carteras de muchas gestoras de nuestro país.
En este tiempo, sin embargo, Bodegas Riojanas ha hecho todo lo contrario, ya que su acción se deja más de un 50% en la última década.
Sin embargo parece que en los últimos meses está recuperando algo de pulso. En doce meses, las dos compañías se comportan de una forma muy parecida y ambas suben alrededor de un 10%.
En lo que va de año, no obstante, son los títulos de la bodeguera más pequeña los que mejor lo hacen. Aunque suben algo más de un 7%, este porcentaje es inferior al de la media del mercado. Es más, Barón de Ley en este tiempo se deja más de un 5% de su valor en bolsa.
Antonio Espín, analista técnico independiente, apunta en su último vídeo semanal en Estrategias de Inversión sobre la compañía que “da la impresión de que cae al soporte y podría reaccionar”.
Las dos empresas han publicado recientemente sus resultados. Barón de Ley ha reducido un 26% sus beneficios debido a una caída de las ventas de un 2%,a la subida del precio de la materia prima y a que no se han repetido los extraordinarios de hace un año.
Bodegas Riojanas, sin embargo, han mejorado sus resultados en un 37% al ganar en los tres primeros meses del año 222.000 millones de euros.
Saber qué piensan los analistas es fácil cuando se trata de Barón de Ley, que tiene una recomendación media de sobreponderar con un precio objetivo que aún le permitiría subir un 9%. Sin embargo, no hay ningún analista que hoy por hoy siga Bodegas Riojanas, según los datos de Facset.
Si miramos los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión, observamos que las dos compañías obtienen la misma puntuación, 7 sobre 10, que situaría su cotización en fase de consolidación.