Bitcoin sabemos que es capaz de lo mejor y de lo peor. Es capaz de subir hasta los 69.000 dólares por activo y perder desde esa cota más de un 75% hasta sus niveles actuales, en los que la cota de los 17.000 se le vuelve a resistir, no por no superarla, sino por no ser capaz de mantenerla para desde ahí, buscar mejores cotas para un activo que no levanta cabeza en 2022.

Y lo mejor en este caso es que nos concentremos en las previsiones, que como está ocurriendo en su dinámica durante el presente ejercicio, presenta peligros de caídas importantes, pero también con perspectivas alcistas que casi podrían doblar sus niveles actuales si se dan las circunstancias adecuadas.

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Vamos por partes. Desde VanEck, el gestor de activos e inversión americano, ponen sobre la mesa sus estimaciones sobre Bitcoin para el próximo ejercicio. Y lo primero que destacan es que esperan un recorte del 82% desde máximos hasta niveles de entre los 10.000 y los 12.000 dólares para la primera criptomoneda del mercado. Eso para el primer trimestre del año, según señala el responsable de activos digitales de la firma, Matthew Sigel. y que, se producirá entre una oleada de quiebras de mineros, lo que señalará, lo que considera el punto más bajo del desgraciadamente famoso “criptoinvierno”.

Y es que consideran desde la firma que la situación de los mineros es prácticamente insostenible, y que han visto, en lo que va del presente ejercicio como se reduce a marchas forzadas su rentabilidad en el caso de Bitcoin. Estos venden sus recompensas para poder sufragar el aumento del precio de la energía, y por tanto los costes de su operativa, junto con la caída en picado de la cotización. Todo ello crea una tormenta perfecta que los ha llevado a mermar sobremanera, la obtención de beneficios.

"El sector minero de bitcoin se encuentra actualmente bajo una presión extrema. Tenemos un índice que refleja las empresas que cotizan en este sector; la capitalización de mercado promedio ahora es inferior a 200 millones de dólares estadounidenses, y cada una de estas empresas está quemando efectivo y cotizando muy por debajo del valor contable", según las declaraciones de Sigel a CoinDesk.

Esto es lo previsto para la primera parte del año, con la sombra de una recesión, heterogénea por países, pero posiblemente global, en el ambiente. Pero las cosas pueden cambiar en el segundo semestre de 2023. Desde VanEck consideran que el rebote podría llegar desde el mes de julio, para llegar hasta los 30.000 dólares por activo, en especial porque podría producirse otro halving que redujera drásticamente a la mitad la criptomoneda, de cara incluso a 2024. Un factor que se ha mostrado decisivo en otras ocasiones con el avance de su cotización.

Mientras en su índice del miedo y la codicia, Bitcoin se coloca en miedo en el nivel de 26 frente al 28 que marcaba este fin de semana y vuelve a los niveles de la pasada semana, mientras mejora en 3 puntos los registrados en miedo extremo en el último mes. Y en cuanto a capitalización, alcanza los 322.100 millones, mientas supone un 38,2% del total del mercado que capitaliza 842.000 millones de dólares, con un ligero avance del 0,2%. En cuanto a su lugar en el mundo económico, esa capitalización le supone colocarse en el puesto 28 de la clasificación global, entre la licorera china Kweichow Motai y Meta.

Y si atendemos a su cotización, vemos que Bitcoin recorta un 2,31% en la última semana con apenas avances nimios, algo inferiores al medio punto porcentual en el mes precedente. Su caída trimestral se eleva hasta el 15,3% y, en lo que va de año pierde casi ya un 64% de su precio.

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