La decisión de BHP de no presentar una oferta vinculante se produjo después de que Anglo dijera que no concedería al grupo minero una prórroga para limar los detalles del acuerdo que exigía que Anglo escindiera primero sus activos sudafricanos.
Esto pone fin a un tenso pulso entre las dos grandes mineras a nivel mundial. De hecho, los accionistas de BHP ya advirtieron de la necesidad de no pagar demasiado por asegurarse el control de Anglo American. “Era una de las mejores oportunidades para ellos y siempre iba ser difícil completarla. Les aplaudo por mostrar disciplina”, dice Andy Forster, director de inversiones de Argo Forster, en declaraciones a Reuters.
Si bien es cierto que BHP llegó en el momento oportuno, la complejidad de la operación, que requería una escisión y la subida del precio del cobre, dificultó su ejecución, afirmó Forster.
Ganar el acuerdo con Anglo habría sido una victoria que habría definido la carrera del conejero delegado de BHP, Mike Henry, que ha remodelado la empresa desde que, en 2020, asumiera el cargo, incluida la operación de compra del productor de cobre Oz Mineral por 6400 millones de dólares el pasado año.
¿Y ahora qué? BHP pretendía hacerse con el control de los preciados activos de cobre de Anglo en Latinoamérica y aumentar el acceso a un metal fundamental para el cambio mundial hacia las energías limpias y los vehículos eléctricos, así como con sus activos de carbón metalúrgico en Australia. «Como inversores, no era obvio que la operación propuesta fuera muy rentable. Sí, aportaría más cobre a la cartera, pero dependiendo de lo que paguen por él, no es necesariamente positivo para el precio de la acción", dijo el gestor de cartera de Pendal Group, Brenton Saunders.
La apuesta de BHP por Anglo refleja la creciente preferencia de las mineras por comprar activos en lugar de construirlos para crecer, dado el aumento de los costes de desarrollo de nuevas minas y la dilatación de los plazos para las autorizaciones reglamentarias, según fuentes de la industria minera en Perth. Según datos de S&P Global, la construcción de una nueva mina lleva ahora una media de más de 16 años.
Los expertos ven claro que BHP busque otros objetivos para ampliar su cartera de cobre lo que podría hacerle mirar hacia Antofagasta o Lundin Mining, ambas con activos de cobre en el norte de Chile, donde tiene sus operaciones Pampa Norte.
Si por el contrario BHP quiere mantener su interés en Anglo, tendrá que esperar seis meses para poder acercarse de nuevo a la compañía, en virtud de las leyes corporativas británicas.