Barclays registró un beneficio neto atribuido de 5.023 millones de libras esterlinas, unos 5.691 millones de euros al cambio actual, en el conjunto de 2022, lo que equivale a un retroceso del 19% respecto del resultado contabilizado por la entidad en 2021.

Las cuentas de Barclays reflejan en parte el impacto adverso de la provisión de 1.220 millones de libras (1.382 millones de euros) por impagos de crédito, en contraste con la liberación de provisiones por impago de 653 millones de libras (740 millones de euros) del año anterior.

Asimismo, el banco británico asumió en el ejercicio un impacto negativo de 1.597 millones de libras (1.809 millones de euros) relacionado con litigios, muy por encima de los 397 millones de libras (450 millones de euros) del año precedente.

Entre enero y diciembre los ingresos de la entidad británica sumaron 24.956 millones de libras esterlinas (28.273 millones de euros), lo que representó un avance del 13,7% respecto de la cifra de negocio contabilizada en 2021, mientras que los costes aumentaron un 14%, hasta 16.730 millones de libras (18.954 millones de euros).

En el cuarto trimestre del año pasado, Barclays obtuvo un beneficio neto atribuido de 1.036 millones de libras (1.174 millones de euros), un 4% por debajo de las ganancias del mismo periodo de 2021, mientras que los ingresos de la entidad sumaron 5.801 millones de libras (6.572 millones de euros), un 12,4% más.

Por otra parte, la directiva del banco ha confirmado su intención de iniciar una recompra de acciones de hasta 500 millones de libras (566 millones de euros) en el primer trimestre de 2023.

Las acciones de Barclays caen un 9,64% a media sesión en la Bolsa de Londres.