Desde los primeros compases del año, el sector financiero ha sido el protagonista. Para bien y para mal. A pesar de que los primeros pasos no fueron buenos – Ver: ¿Carbón para los bancos?
Eso sí, de todos es sabido que la clave no está en cómo empieza….sino en cómo acaba. Lo cierto es que en estos primeros pasos del año, los bancos han tenido motivos de celebración especialmente ante la posibilidad de que la Comisión Europea relaje las reformas financieras para que “las grandes entidades europeas no se vean obligadas a automáticamente separar sus operaciones prestatarias de las de trading arriesgado”. Algo que dará más poder de decisión a las autoridades nacionales para determinar la aplicación de las reformas.
Un punto de inflexión para algunos bancos. La situación de la entidad es envidiable y ha alcanzado los objetivos fijados por algunas casas como BNP Paribas
José Luis García, de Enbolsa.net pone los pies en el suelo y admite que nunca compraría en las fases impulsivas de los precios. “Nosotros compramos las correcciones bajistas de las tendencias alcistas y entramos cuando estas correcciones nos muestran mensajes de finalización, por lo tanto, nunca comprarías Bankinter en pleno impulso”.
Y ¿sobre Popular? Es otro de los valores que ha conseguido romper niveles y estar en las quinielas de los expertos. De hecho, Roberto Moro, de Apta Negocios habla de su “eterno favorito” pues todo lo que sea permanecer por encima de 4.45 euros, profundiza en un escenario alcista en el valor. La resistencia más inmediata, dice el informe de Cortal Consors, se coloca en los 4.89 euros y posteriormente los 5.01 euros.
Los dividendos, factor de incertidumbre
Hoy la prensa publica que la compañía ha culminado una operación de importante cuantía para apuntalar su solvencia, en la que ha convertido bonos en acciones por importe de 696 millones. Una operación, cuenta Expansión, con la que cumple un doble objetivo: fortalecer su capital de cara a los test de estrés y dejar de pagar los intereses que percibían los titulares de los bonos obligatoriamente convertibles. Una operación que deriva en la dilución del accionista.
Aunque en pro de éste irá el dividendo. Tal y como les mostramos en “El dividendo de 2014 ¿Popular y Endesa marcarán el camino?” la entidad presidida por Ángel Ron ha sido la última de las compañías del Ibex 35 en sumarse a la moda del cambio de cara al próximo 2014 al anunciar la vuelta al dividendo. Dará la opción de cobrar en efectivo o en nuevos títulos de la entidad un dividendo de 0.04 euros en febrero de este año, con cargo al ejercicio de 2013.
Este último pago – el de acciones – es precisamente algo a lo que se resistió Bankinter, por lo que en principio sólo tiene dos opciones: pagar vía script dividend o reducir el actual payo ut del 50% actual.
Esta retribución es otro de los factores a los que tendrá que atender el sector financiero, ante las insistentes “sugerencias” de los organismos monetarios. El último en pronunciarse ha sido el Fondo Monetario Internacional que habla de “limitar los dividendos en efectivo” favoreciendo la figura del ‘scrip dividend’. Lo dijo también el Banco de España sugiriendo que lo ideal sería no retribuir más del 25% en efectivo y hacerlo en acciones.