En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Bankia ha subrayado que la mejora de los resultados se ha producido gracias a un aumento en los ingresos por comisiones, con una nueva reducción en los costes por la aceleración en la captación de sinergias tras la fusión con BMN, y con un volumen estable de provisiones y saneamientos.
El beneficio de Bankia del tercer trimestre estanco ascendió a 229 millones de euros, lo que supone un aumento del 1,7% respecto al mismo periodo del año anterior.
El margen de intereses de Bankia se elevó a 1.542 millones, un 5,1% más que hasta septiembre de 2017, consecuencia de la integración de BMN.
Los ingresos por comisiones aumentaron un 25,8% (3,1% en comparación homogénea) y se elevaron a 799 millones de euros, con una positiva evolución de las tasas por medios de pago (+13,1%), y de administración y gestión de activos, principalmente fondos de inversión (+13,6%) y planes de pensiones (+8,5%).
El resultado por operaciones financieras creció en 67 millones (+21,4%), hasta 381 millones, por la materialización de plusvalías latentes derivadas de las ventas de renta fija para adelantarse a la previsible evolución de los tipos de interés. De esta forma, el margen bruto avanzó un 12,8%, hasta 2.706 millones.
Los gastos de explotación de Bankia crecieron un 21,8% consecuencia de la integración con BMN, pero en términos homogéneo cayeron un 2,9% en los nueve meses debido a la anticipación del ERE firmado tras la fusión, que se completará en noviembre. En el tercer trimestre de este año, los gastos fueron un 5,4% menores a los del mismo trimestre del año anterior. Esta evolución de los costes ha permitido situar la ratio de eficiencia en el 51,8%.
Las dotaciones a provisiones de crédito y adjudicados durante el tercer trimestre se situaron en 334 millones de euros, un 0,3% menos que hasta septiembre de 2017 por la mejora de la calidad de los activos. El coste del riesgo (provisiones sobre crédito) cayó seis puntos básicos desde diciembre, hasta el 0,18%.
En la presentación de sus resultados, Bankia también ha destacado el descenso de los activos dudosos (cayeron en 1.755 millones de euros en nueve meses) como en el saldo de activos adjudicados (561 millones menos). Esta redución, permitió a la entidad bajar la tasa de morosidad en 1,1 puntos desde diciembre de 2017, hasta situarla en el 7,8%, con una ratio de cobertura del 54,8%.
Asimismo, Bankia vendió 10.700 activos adjudicados durante los tres primeros trimestres del ejercicio, por un importe de 487 millones de euros, un 13,1% más que en el mismo periodo del año anterior.
En términos de solvencia, la entidad finalizó los nueve primeros meses con una ratio de capital ordinario (CET1) fully loaded (anticipando los futuros requerimientos de Basilea III que serán de aplicación en 2019) del 12,41%, sin incluir las plusvalías latentes de la cartera de deuda soberana, lo que supone un aumento de 46 puntos básicos con respecto al cierre de 2017.
Esta ratio muestra un exceso de capital de 340 millones de euros sobre el nivel del 12% fijado en el Plan Estratégico del banco 2018-2020 como base para devolver capital a los accionistas. Incluyendo las plusvalías soberanas latentes, el CET 1 fully loaded habría sido a 30 de septiembre de 2018 del 12,46%.
En cuanto al nivel de total solvencia fully loaded, a cierre de septiembre, asciende al 16,21%, registrando un incremento en el año de 148 puntos básicos.
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha explicado que “el banco ha logrado incrementar los beneficios gracias a que hemos completado con éxito la fusión con BMN, el principal reto que teníamos al comienzo del ejercicio, y a que hemos aprovechado la oportunidad de hacer negocio en segmentos que habíamos tenido limitados en años anteriores, como la promoción inmobiliaria y los créditos a grandes empresas con acceso a los mercados”.