Tras años subsistiendo con tipos de interés negativos, la senda de endurecimiento de la política monetaria del BCE fue recibida como agua de mayo por unos bancos españoles que aprovecharon para mejorar sus márgenes y anotarse beneficios récord en 2023

Ahora que se espera que los tipos comiencen a bajar tan pronto como en junio, el temor de los inversores es que los bancos pierdan fuelle, pero parece que otra vez el BCE podría dar un apoyo con el que no se contaba.

La institución que preside Christine Lagarde ajusta el marco operativo (tipos e instrumentos de financiación del sector financiero) para mejorar el impacto de la política monetaria. Las decisiones adoptadas “establecen principios y parámetros fundamentales para implementar la política monetaria y proporcionar liquidez del banco central en un contexto de reducción gradual del exceso de liquidez en el sistema bancario, que, no obstante, seguirá siendo considerable en los próximos años”, señala el banco central.

“Me complace anunciar que el Consejo de Gobierno ha aprobado estas modificaciones de su marco operativo, que reflejan los importantes cambios en el sistema financiero y en la política monetaria de los últimos años”, ha explicado Lagarde. “El marco asegurará que la ejecución de nuestra política monetaria continúa siendo eficaz, sólida, flexible y eficiente en el futuro durante el proceso de normalización de nuestro balance”.

Los cambios más importantes serían tres, según destaca Rafael Alonso, analista de Bankinter. En primer lugar, el tipo de interés de la facilidad de depósito (DFR) será el principal instrumento en la dirección de la política monetaria (frente al tipo de financiación). Además el Eurosistema proporcionará liquidez mediante operaciones de financiación a corto (subastas del BCE) y largo plazo (LTROs a 12 meses) y el diferencial entre el tipo de interés de las operaciones principales de financiación (MRO) y el DFR (Depósito) se reducirá a 15 pb a partir del 18 de septiembre de 2024. 

“Es una buena noticia para la banca porque reduce el diferencial existente entre el coste de financiación y la remuneración por la liquidez depositada en el BCE (también conocido como “corridor”)”, explica Alonso. “Ahora el coste de financiación con el BCE se sitúa en 4,5% mientras que el tipo de depósito (ingresos por liquidez) se sitúa en 4,0% (diferencial de 50 pb). Reducir este diferencial hasta 15 pb implica una mejora del margen de Intereses de 35 pb con los tipos actuales”.

Evolución de los bancos en Bolsa

Los seis bancos del Ibex 35 acumulan avances en el acumulado del año. El que mejor lo está haciendo de momento es BBVA, que sube más de un 25% y se encuentra en máximos. No obstante, es el único al que los analistas no dan potencial para seguir subiendo: el consenso recopilado por Reuters le da un potencial negativo de algo más del 1%, con el precio objetivo en 10,19 euros por acción.

Un 16,2% por delante tiene Banco Sabadell para subir, con un precio objetivo de consenso en 1,57 euros. La entidad catalana sube un 21,3% en lo que va de 2024. Casi un 20% ha subido Caixabank en el mismo período, y los analistas le dan un potencial adicional de un 19,8% hasta una valoración de 5,32 euros por acción.

Bankinter presenta un potencial alcista de un 22% hasta los 7,84 euros por acción tras haber subido un 11% en los casi tres meses de 2024. Para Unicaja el camino alcista que se abre es del 23,6%, con los analistas fijando el precio objetivo en 1,25 euros. Sube un 13,7% en el acumulado del año.

El banco que se ha quedado más retrasado de momento es Banco Santander, con una subida en el Ibex 35 de un 8%. No obstante, los analistas le dan un potencial alcista de un 21% hasta un precio objetivo de 4,95 euros.