Las acciones de Banco Santander están cada vez más cerca de lo previsto por la presidenta de la entidad financiera. Si recuerdan, a mediados de diciembre su presidenta Ana Botín, cuando las acciones cotizaban a 2,7 euros por acción lanzó una apuesta decidida por Banco Santander. Primero invirtió en medio millón de títulos del banco que le costaron 1,3 millones de euros y después adquirió 2,16 millones de opciones sobre acciones para comprar títulos de la entidad a un precio de 3,25 euros por acción.
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Y la apuesta está dando sus frutos: Santander cotiza ahora en los 3,11euros con una revalorización anual del 5,95%, mientras que presenta uno de los mejores recorridos del último mes completo a doble dígito. En concreto del 15,34% tras subir en 14 de las últimas 16 sesiones cotizadas, desde mediados de diciembre y con ganancias acumuladas en las siete últimas, mientras se asienta sobre los 3 euros por acción por primera vez desde la llegada de la variante ómicron.
Detrás de los avances, comienza un 2022 en el que la Reserva Federal deja entrever que no solo subirá los tipos de interés en Estados Unidos en tres ocasiones, como apuestan los analistas, en este presente ejercicio, sino que además lo hará antes de lo que el mercado esperaba. Un “maná” sin duda para los bancos que así lo están traduciendo en sus avances, como ocurre con el Santander.
Todo ello con el mejor dividendo del sector bajo el brazo. Con una rentabilidad para el accionista que supera el 6,6% y un plan determinado para hacer que los inversores vuelvan al valor. Primero con el pago en noviembre pasado, tras el levantamiento del BCE, de 4,85 céntimos de euro por acción en efectivo, y después con el programa de recompra de acciones por valor de 841 millones de euros, como parte de esa remuneración. Este es el primero que realiza la entidad.
Este volumen representa el 20% del beneficio ordinario del grupo en el primer semestre del pasado año. Ahora, se espera, en este primer trimestre de 2022 una remuneración adicional con cargo a los beneficios de 2021.
Más allá de ello, Banco Santander espera que mañana se cierre el plazo, una vez ampliado, para acudir a la OPA lanzada sobre el 20% que no controla de Santander Consumer de Estados Unidos. Además, ha vendido la que fuera sede el Popular en Portugal y según fuentes del mercado la operación alcanza los 50 millones de euros, aunque seguirá en el edificio hasta mediados de año.
Además de esto, PagoNxT, la filial de los negocios de pagos de la entidad ha completado la compra de la compañía uruguaya New Age Data a través de su franquicia global GetNet, de forma que avanza en su expansión por Latinoamérica en este negocio.
Santander “logra rebotar con contundencia a partir del soporte comprendido en torno a los 2,838 / 2,653 euros por acción, movimiento que permite al oscilador MACD posicionarse por encima de su banda neutral o cero, lo que le permite atacar sus medias móviles de medio y largo plazo, cuya superación, habilitaría un potencial ataque a la banda superior del amplio proceso lateral que identificamos en torno a los 3,456 / 3,3535 euros por acción”.
Santander en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
En cuanto a los indicadores técnicos que elabora Estrategias de Inversión, la entidad se mueve en modo rebote, con una mejora de un punto que alcanza una baja puntuación total de 3 sobre 10 de los posibles para el valor. De hecho, Santander presenta una tendencia bajista, tanto a medio como a largo plazo, con momento total positivo, lento y rápido, con volumen decreciente a medio y largo plazo y rango de amplitud decreciente a medio y también en la volatilidad que marca el valor a largo plazo.