Durante la citada presentación no solo se ha centrado en que ahora es el momento de adaptarse por la volatilidad, aumentando el riesgo en periodos más halagüeños y reduciéndolo cuando llegan las turbulencias, sino que también se ha centrado en dónde no se deben tomar posiciones en este momento.
En este sentido ha hablado de que la exposición a divisa emergente “se debe ampliar o reducir según se vayan produciendo los acontecimientos”
“No invertimos en moneda local emergente por nuestra visión en este momento del mercado (…) Lo principal que miramos a la hora de invertir en mercados emergentes es el riesgo de desplome que hay; por eso pensamos que México o Colombia son buenas regiones que pueden ofrecer grandes oportunidades de inversión”, ha comentado el gestor. Con todo, en caso de decantarse por divisas emergentes lo haría por “el real brasileño, la rupia de Indonesia y el rublo ruso”.
Asimismo, lo que ha querido dejar claro en todo momento es que más que invertir por sectores, le interesa centrarse en regiones. Así, una de los factores que sigue dentro de su estrategia es la de “evitar todo tipo de exposición al petróleo y a los países que tienen relación directa con el crudo”.
“La demanda de petróleo no tiene nada que ver ahora y esto es un conflicto real entre Estados Unidos, Arabia Saudí y Rusia”, comenta. En este sentido ha añadido que son bastante conservadores “con los países que se dedican a exportar petróleo” y hay que evitarlos en toda medida por un tiempo.
Sobre los bancos centrales ha mostrado cierto escepticismo sobre que sean capaces de controlar la inflación, puesto que, hasta ahora, sus medidas se han reflejado “con consiguiente deflación”, como así lleva sucediendo en Japón desde hace varios años. Siguiendo esta línea sostiene que el QE “hasta ahora ha sido capaz de demostrar deflación”.