El objetivo de ArcelorMittal es priorizar la optimización de costes y de la calidad frente a los volúmenes en la coyuntura actual. Conjuntamente, estas medidas se traducirán en una reducción temporal de la producción de aproximadamente tres millones de toneladas en términos anualizados, explica la empresa en un comunicado.

Las acciones del grupo acerero caen en el Ibex 35 cerca de un 5% hasta los 17,9 euros por acción y lideran los descensos del selectivo español este lunes en el que las bolsas se tiñen de rojo tras la decisión del presidente de EEUU, Donald Trump, de subir los aranceles a productos chinos que se comercialicen en EEUU del 10% al 25%.

Esta decisión está castigando más a los valores expuestos al sector industrial y a las exportaciones como ArcelorMittal, CIE Automotive que se deja un 3,85% y Técnicas Reunidas un 3,25% en la bolsa hoy.

Los valores que sufren algo menos este lunes en el Ibex 35 son algunos valores llamados 'defensivos' como Endesa que cotiza plano, Red Eléctrica un 0,25% y Cellnex Telecom un 0,5%.

“La difícil decisión de reducir temporalmente la producción en nuestras instalaciones de cabecera en el segmento de productos planos en Europa no ha sido tomada a la ligera. Somos conscientes del efecto que ello tiene para los empleados y las comunidades locales y nos esforzaremos en asegurar el establecimiento de medidas sociales para apoyarles durante este período", apunta Geert van Poelvoorde, consejero delegado de ArcelorMittal Europa-  Productos Planos.

Estas actuaciones reflejan la debilidad de la demanda en la coyuntura actual en Europa, una situación que se ve agravada por un aumento de las importaciones a pesar de las medidas de salvaguardia establecidas por la Comisión Europea. A esta difícil coyuntura se suman los elevados costes energéticos y los crecientes costes vinculados a las emisiones de carbono.

"Estamos manteniendo contactos con los diversos interlocutores para solicitar que se refuercen las medidas de salvaguardia al objeto de evitar que sigan aumentando los volúmenes de importaciones por efecto de la continuada sobrecapacidad a escala mundial y el debilitamiento de la economía en países vecinos, como Turquía", afirman desde ArcelorMittal.

"Asimismo, continuaremos abogando por el establecimiento de un ajuste en frontera de carácter ambiental, con el fin de asegurar que las importaciones en Europa estén sujetas a los mismos costes vinculados a las emisiones de carbono que los productores en Europa. La industria siderúrgica en Europa puede tener un futuro próspero, pero es preciso que se establezca un marco de competencia en igualdad de condiciones para asegurar que no se confiera una ventaja injusta a los competidores extracomunitarios”, añaden.

En Cracovia se paralizará temporalmente la producción en las instalaciones siderúrgicas de Cabecera (horno alto y acería). El mercado del acero en Polonia se ha visto especialmente afectado, debido al incremento de las importaciones de acero procedentes de Rusia (las importaciones en Polonia de acero de origen ruso se multiplicaron por cuatro en 2018 con respecto a los niveles de 2017) y a los precios de la electricidad, que se sitúan entre los más altos de Europa. 

En Asturias se reducirá la producción en las instalaciones siderúrgicas de Cabecera. Los costes de la electricidad en España también son muy elevados, y el mercado en el sur de Europa se ha visto afectado por un aumento sin precedentes de los volúmenes de importaciones procedentes de países extracomunitarios. 

A pesar de las medidas arancelarias de salvaguardia de carácter permanente establecidas en la UE en febrero de 2019, se ha producido un aumento continuado y sostenido de las importaciones de productos planos de acero en Europa. Las importaciones de productos planos de acero en Europa se sitúan actualmente en máximos históricos; las importaciones de bobina caliente aumentaron un 37 % este año con respecto a 2017, en términos anualizados.

Asimismo, el precio de los derechos de emisión de dióxido de carbono se ha incrementado en aproximadamente un 230% desde el inicio de 2018, lo que constituye una presión competitiva adicional para los productores siderúrgicos europeos. En el marco del Sistema de Comercio de Emisiones (ETS, por sus siglas en inglés) de la UE, sólo el acero producido en Europa está sujeto a una tasa sobre el carbono. ArcelorMittal reclamó con anterioridad el establecimiento de un ajuste en frontera de carácter ambiental por medio del cual se apliquen a las importaciones de acero en Europa las mismas normas en materia de emisiones de CO2 que se apliquen al acero producido en Europa, en el marco del ETS.

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