Tal y como informa Bloomberg, Rusia ha cortado drásticamente las operaciones que mantiene cerca de Kiev. Esto podría ser un paso más hacia el fin de la guerra que comenzó el pasado 24 de febrero.
La noticia llega cuando los negociadores ucranianos y rusos se han reunido este martes en Turquía para mantener las primeras conversaciones cara a cara en casi tres semanas, en las que Ucrania busca un alto el fuego sin comprometer el territorio o la soberanía, ya que sus fuerzas han hecho retroceder a los rusos de Kiev. Rusia habría reducido la actividad bélica en la ciudad de Chernihiv en un intento de que las negociaciones comiencen con menos presión.
El viceministro de Defensa ruso dijo tras las conversaciones que Rusia había decidido reducir drásticamente su actividad militar centrada en Kiev y Chernihiv, según Reuters, mientras que los negociadores ucranianos propusieron adoptar un estatus neutral a cambio de garantías de seguridad.
Los funcionarios ucranianos dijeron que no abrirían ningún corredor humanitario el lunes para permitir la evacuación de civiles a la luz de la información que sugería que las fuerzas rusas podrían estar planeando un ataque a las rutas de evacuación.
Un mercado "desordenado"
El mercado recibe con optimismo cualquier avance y el Ibex 35 está ya a solo el 4% de recuperarse de las pérdidas anuales. Pero, si miramos la escena en su conjunto, el panorama no invita al optimismo. Según apunta Pablo García, director de Divacons Alphavalue, el mercado está teniendo un comportamiento "desordenado". Normalmente son los bancos centrales los que se encargan de poner orden, pero en esta situación tienen otros frentes abiertos previos, como la pandemia y ahora el conflicto de Ucrania, y su labor se está viendo alterada.
Los inversores en renta variable deben mirar al mercado de bonos, apunta el experto, porque ese camino de las subidas de tipos largos se está produciendo, con un bund que cotiza a 0,64%, cuando hace poco estaba en el 0,20%. E incluso la curva de tipos en algunos tramos en EEUU se ha invertido. Hay quien apunta a que eso puede provocar una recesión. Desde Divacons Alphavalue creen que no se llegaría a ese punto, "es menos probable, por lo menos en el corto plazo no lo prevemos".
Eso sí, los niveles de crecimiento van a ser menores y hemos visto una subida muy fuerte de la inflación. También veremos caídas a nivel microeconómico. Hay que tener en cuenta que lo peor está por llegar, en el segundo trimestre, dado que el primero no recogerá todo el impacto del conflicto de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero.
Además, el experto explica que "el mercado se está poniendo caro" y todo indica que se pondrá aún más caro. La expectativas de beneficios a futuro y la cotización en el numerador están tirando a que los mercados se pongan más caros. A los inversores que han apostado por recursos básicos o materias primas, les ha ido bien. Pero más allá de esos sectores y algún otro puntual, las caídas son abultadas. "La conclusión es que los mercados están demasiado optimistas con esa salida de flujos de la renta fija hacia la renta variable", pero las tensiones geopolíticas van a continuar.
A ello se suma que la inflación es persistente y que vamos a ver más subidas de tipos de las que hasta ahora se han confirmado, "Lagarde va a tener que cambiar el discurso porque la inflación se les está escapando". En su último informe, el Bundesbank alertaba de una desaceleración en el segundo trimestre. Esto afectará en especial a Alemania y a España, "donde el riesgo de estanflación es real". Mejor parado saldrá Estados Unidos, menos afectado por la guerra en Ucrania.