Ayer por la tarde Alcoa dio el pistoletazo de salida a la temporada de resultados empresariales. Sus cuentas superaron ligeramente las expectativas, sin embargo, su acción no invita a invertir, al menos, por el lado largo.
Como viene siendo tradición, Alcoa cortó la cinta que inaugura la temporada de resultados del segundo trimestre. Durante estos meses, la siderúrgica obtuvo un beneficio por acción de 0,07 dólares y unos ingresos de 5.850 millones de dólares, frente al BPA de 0,06 dólares que esperaban los expertos consultados por FactSet. Sin embargo, una ligera mejora de los beneficios no será suficiente para levantar su gráfico, que actualmente nos
dibuja una compañía muy bajista. De hecho, si aplicamos nuestros
indicadores técnicos Premium, la nota que Alcoa obtiene es un suspenso bajo, muy bajo, tan sólo un 1. Esto le convierte en la acción del Dow Jones con menor nota y, por ende, la más bajista. La tendencia a medio y largo plazo es bajista, el volumen decreciente, y, por tanto, el momentum negativo. Sólo la contención de la volatilidad ofrece algo de esperanzas.
Desde mediados de 2011 la cotización de Alcoa no ha dejado de caer y, actualmente su objetivo aparente son los mínimos históricos, en 5 dólares.