El EBITDA del conjunto del ejercicio creció hasta los 743 millones de euros con un margen EBITDA que fue del 46% para todo el ejercicio, en comparación con el 55% en 2022. Los ingresos netos fueron de 1.630 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 22% respecto al año anterior.
El volumen procesado de la compañía fue de 970.100 millones de euros en el año, un 26% más que el año pasado. De estos volúmenes, los volúmenes en el punto de venta fueron de 159.900 millones de euros, un 42% más en todo el año.
El CapEx fue del 4% de los ingresos netos de todo el año, en comparación con el 7% de 2022.
A pesar de los resultados, mejora las estimaciones
La compañía asegura que el objetivo es “seguir aumentando los ingresos netos entre el 20% y el 20% alto, hasta 2026 inclusive”. Respecto al margen EBITDA, la compañía quiere mejorarlo a niveles superiores al 50% en 2024 ya que “esperamos beneficiarnos del apalancamiento operativo inherente a nuestro modelo de negocio”.
Además, la compañía asegura que su objetivo es mantener un gasto de capital sostenible de hasta el 5% de los ingresos netos.
Las subidas que tiene hoy el valor incrementan la revalorización de más del 19,7% que ya acumula en el año. Una compañía que, a juicio del consenso, podría haber corrido mucho. El precio objetivo medio de los analistas está en los 1245 euros, lo que supone una caída del 10,2% sobre los precios actuales.
De los 34 analistas que cubren el valor, 17 se muestran compradores frente a 15 que optan por mantener y solo dos que venden la acción.