El Consejo de Administración de Adif ha aprobado en su última reunión la adjudicación, por importe de 11.851.157 euros (IVA incluido), del contrato de servicios para el mantenimiento y soporte de los sistemas de gestión centralizada de los Centros de Regulación y Control (CRC) de Madrid, Antequera, Albacete, Zaragoza y Segovia.
Estos CRC son los responsables de la gestión, supervisión y regulación del tráfico ferroviario de las líneas: Madrid-Sevilla, La Sagra-Toledo, Córdoba-Málaga, Madrid-Levante, Ourense-Santiago, Madrid-Valladolid y Madrid-Barcelona-frontera francesa.
El contrato, adjudicado a la empresa Indra Sistemas por un periodo de 24 meses, engloba el mantenimiento tanto preventivo como correctivo de los sistemas de gestión centralizada, necesarios para asegurar la disponibilidad y fiabilidad de los sistemas que intervienen en la actividad de los CRC.
De esta manera, son objeto de mantenimiento los equipamientos, sistemas y entornos informáticos instalados tanto en los CRC como en los Puestos Regionales de Operación (PRO), edificios técnicos de líneas de alta velocidad y estaciones.
ANEXO
Los Centros de Regulación y Control de alta velocidad
La red de alta velocidad española dispone de avanzados Centros de Regulación y Control (CRC) encargados de la explotación y el seguimiento de los trenes con un enfoque innovador que integra todos los sistemas de información necesarios para la gestión de la red.
Los CRC dirigen y coordinan las circulaciones en tiempo real, siguiendo un plan de transporte definido, cumpliendo los índices de seguridad y puntualidad exigidos, y permitiendo una respuesta inmediata ante las posibles incidencias.
En la actualidad existen cinco CRC para alta velocidad. El CRC Puerta de Atocha, que ejerce de centro neurálgico para toda España; el CRC Gutiérrez Soto, ubicado en Zaragoza, para la LAV Madrid-Barcelona-frontera francesa; un tercero situado en Antequera para el seguimiento de la línea Córdoba-Málaga; el CRC ubicado en Albacete para gobernar la LAV Madrid-Cuenca-Albacete-Valencia/Alicante y, por último, el ubicado en Segovia para el trayecto Madrid Chamartín-Valladolid, como respaldo del CRC Puerta de Atocha.
Estos CRC suponen una respuesta a las necesidades de la gestión del tráfico de alta velocidad, que se han concretado en el desarrollo de la Plataforma Integradora de Tráfico Ferroviario Da Vinci, de diseño español y propiedad intelectual de Adif.
Da Vinci supone la creación de un entorno ferroviario orientado hacia la supervisión integral de los procesos, sistemas y usuarios, agrupando todos los subsistemas antes independientes.
De este modo, la señalización, electrificación, comunicaciones, información al viajero, energía y seguimiento son centralizados por la plataforma para que crucen e intercambien información, permitiendo además su monitorización remota en los CRC centrales.