Este experto reconoce que esta solicitud permitirá que “muchos activos españoles que han estado fuera del radar, vuelvan a estar en el objetivo de los expertos y que se vuelva a primar los fundamentales”. Por supuesto, el ciclo español de 2013 seguirá tocado por lo que no tendría exposición a aquellos activos cuya cuenta de resultados está expuesta al ciclo español puro y duro, aunque hay compañías españolas que están expuestas al ciclo internacional. “Esta falta de dinero internacional ha llevado a que haya muchas oportunidades en compañías como las eléctricas, donde tenemos un nuevo marco regulatorio y creo que, una vez se reduzca la prima de riesgo, la discriminación entre acciones será clave de inversión.
Estamos en la última fase del largo proceso de reestructuración del sector financiero pero “parece que se está cogiendo el toro por los cuernos. La apuesta del banco malo es el último paso en el proceso pero los bancos seguirán presionados – no mejorarán por el lado de la mora, los márgenes seguirán presionados por los bajos tipos de interés – pero en algún momento el mercado tendrá que poner en precio que estamos en un nuevo marco que propiciará un sistema más sano, con márgenes más altos y que no puede seguir cotizando a los ratios a los que cotiza actualmente”.
Respecto a la ampliación de Banco Popular, Iturriaga reconoce que es – dentro de los hitos del sector financiero- una de las claves. “Para valorarla tendríamos que tener en cuenta el banco que queda una vez consiga esta ampliación. Tiene unos márgenes mejores que el conjunto del sistema, porque tiene una base de clientes mejor y por otro lado, será un banco que con el plan de negocio que han presentado para 2014 podría estar provisionado en el escenario más pesimista de Oliver Wyman y probablemente generará en torno a 1.000 millones de euros”.
Sin embargo, a los múltiplos a los que cotiza hoy, “será atractivo siempre y cuando nos fiáramos del management. Uno de los grandes problemas que tiene la entidad en el proceso que nos lleva a decidir si acudir o no a la ampliación es que el equipo directivo, responsable de la situación actual – pisó el acelerador cuando se veían los mismo síntomas de la burbuja inmoibliaria, el que ha retrasado la ampliación, responsable de la compra de Pastor- pesa mucho en esta toma de decisión. El hecho de que el equipo directivo continúe pesa mucho a la hora de tomar esa decisión de acudir o no
La bolsa española está muy barata y, aunque el ciclo español por el momento no es por el que yo apostaría, haría una comparativa del año 2006 a cómo estamos ahora. Por entonces, cotizaba a más de 20 veces, inflows de capital por valor de 700 millones de euros, la economía crecía al 8% en términos nominales pero la expansión del crédito estaba al 25% y habría superávit fiscal. Con estos argumentos encima de la mesa, que nos hacían entender que España no era un país para invertir, ahora tenemos equilibrio por cuenta corriente alcanzado en 2012 que pone sobre la mesa la magnitud del ajuste que se ha producido en la economía española, es el mejor indicador para medir el esfuerzo que nos queda por delante. Y el ajuste de 11 puntos del PIB sólo ha supuesto una contracción en la economía de 4 puntos. El tema del desapalancamiento, “se ha reducido en los últimos años los créditos concedidos, en términos agregados un 5% y el 15% en el sector privado y se está haciendo una reconversión del tejido industrial. Se han puesto encima de la mesa las reformas y los ajustes y hay indicadores como la evolución del déficit por cuenta corriente que hace que, comparado con la valoración fundamental, hacen que España vuelva a ser invertible en el momento”.
Kalahari Alpha y Okavango Delta, principales posiciones
En los dos fondos juegan a lo mismo, cada uno dentro de su rango de volatilidad. Las principales claves están por un lado financieras a través de compañías de seguros – para jugar la reducción de las primas de riesgo- que además han estado muy perjudicadas por su exposición a deuda española.
Por la parte del negocio operativo, las dos cotizadas españolas son dos ejemplos de buen hacer. En el momento en que la prima de riesgo se reduzca, volveremos a cotizar los fundamentales. Por el lado de bancos, posición mucho más reducida. Luego están industriales – aquellas compañías pequeñas y medianas exportadoras, con buen balance pero cuya situación no depende del consumo español. Las utilities es un sector que tiene un marco regulatorio claro. Compañías como las españolas, cotizando a los múltiplos a los que cotiza, es un ejemplo claro de que la bolsas españolas sigan bajo ese efecto del estigma.
A largo plazo, Okavango Delta con una exposición del 100% a renta variable, objetivo batir a la bolsa algo que hace desde el principios de sus días. Y el Kalahari Alpha tiene un 30-40% de la rentabilidad que dé Okavango. Pero a día de hoy, las perspectivas de medio plazo estoy convencido de que los fundamentales al final acabarán imponiéndose, solo es cuestión de itmepo que acabe poniéndose en precio.