Esto se produce después de que fuera noticia que Soros aumentara su exposición al oro ante los temores sobre una gran corrección en los mercados de renta variable. Ahora se ha conocido que Soros Fund Management, el holding del tiburón de las finanzas, ha recortado drásticamente sus acciones del oro en el segundo trimestre, cuando los precios del lingote se elevó a máximos de dos años, con la normativa reguladora de la SEC que mostró el pasado lunes.
El fondo, que tomó posiciones en el fondo cotizado del oro más grande del mundo, SPDR Gold Trust, en el primer trimestre de 2016 después de una ausencia de tres años en los mercados, redujo abruptamente su participación en el segundo trimestre.
El fondo financiero del multimillonario George Soros disminuyó sus participaciones en este ETF en 240.000 acciones por valor de 30,4 millones de dólares, de las 1,05 millones de acciones por valor de 123,5 millones de dólares que adquirió durante el primer periodo del año. Una reducción que le ha permitido recoger cuantiosos beneficios por el rally del metal dorado en los mercados.
Soros también recortó suculentamente su participación en Barrick Gold Corp a 1,07 millones de acciones por valor de 22,9 millones de dólares, de las 19,4 millones de acciones que el inversor europeo adquirió en los tres primeros meses de 2016.
"Los inversores han aprovechado la subida de las explotaciones mineras durante el primer trimestre del ejercicio, algunos de los cuales han superado enormemente el subyacente en la primera mitad del año”, aseguró Tai Wong, director de metales básicos y preciosos de trading de BMO Capital Markets en Nueva York.
"Esto que ha realizado George Soros no quiere decir que haya que empezar a ser pesimista con el oro, sino que más bien es una recogida de beneficios por la evolución que ha tenido en los mercados”, añadió el experto.
Esta decisión se produjo después de que los precios del oro sufrieran una revalorización de entorno al 7% en el segundo trimestre del año, después de una subida del 16% en el primer trimestre del 2016. Un avance que supuso la mayor subida de casi las tres últimas décadas.
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