Parece que va a comenzar a reactivarse el proyecto de 1.000 millones de dólares en Atacama I en el norte de Chile, donde la empresa conjunta entre Abengoa y la firma privada de EIG Global Energy Partners, reiniciarán los trabajos una vez que se hayan completado los acuerdos sobre el plan de reestructuración de la deuda de Abengoa, apunta la agencia de noticias norteamericanas.
En este sentido, cerca de 1.500 trabajadores fueron despedidos desde que comenzó el proyecto en enero, dejando sólo el personal de mantenimiento en el lugar. La reanudación del trabajo podría comenzar en el cuarto trimestre, según estas mismas informaciones.
"El proyecto será un hito en América Latina", dijo Carlos Barria, ex jefe de la división de energía renovable del gobierno y un profesor de la Universidad Pontificia Católica de Chile. "Es una forma alternativa importante de producción de energía, ya que reúne la luz del sol y el poder de almacenamiento", añadió.
A diferencia de los proyectos de paneles solares, Atacama I se compone de 10.600 paneles que concentran la luz solar en una solución de sal líquida sobre una torre gigante en el centro, que impulsa una turbina para producir electricidad. Su ubicación en el desierto del norte de Chile es uno de los lugares más soleados y secos de la Tierra. Un exceso de energía solar en Chile se ha traducido en la caída de los precios de la energía durante los cuatro primeros meses de este año.
Como contexto, las acciones de Abengoa siguen atravesando un momento complicado y como muestra de ello es que ahora mismo se encuentra cotizando sobre niveles de soportes clave. Actualmente se encuentra por encima de los 0,19 euros, mientras que ese soporte que resulta vital son los 0,18 euros. Los inversores siguen sin confiar en exceso en este valor, incluso después de haber salvado la quiebra.