Una vuelta de 360º. Las caídas que tuvieron ayer al cierre los mercados americanos derivaron en números rojos en el Nikkei, además favorecido por un mal dato del sector manufacturero en China, lo que se ha extendido a la renta variable del viejo continente y de nuevo a los futuros de Wall Street. De hecho, la preapertura viene en números rojos. El S&P500 se deja un 0.8% en los 1642 puntos. El Dow Jones descuenta un 0.6% hasta los 15217 puntos mientras que el tecnológico se deja un 0.8% en preapertura.
Los mercados miran de reojo a la Reserva Federal. Ayer su presidente, Ben Bernanke señaló en un discurso ante el Congreso que la retirada de las medidas extraordinarias de apoyo a la economía antes de tiempo, podría dañar la recuperación. Sin embargo, las actas de la última reunión del organismo mostraron que la división entre los miembros del organismo sobre este tema ha crecido. Hoy, las declaraciones llegan de la mano del presidente de la FED de St. Louis, James Bullard, que ha reiterado que el organismo debe continuar con su programa de acomodación monetaria y la compra de activos.
En el plano empresarial, Hormel Foods ha publicado un beneficio de 0.46 dólares en el primer trimestre, ligeramente por debajo de los 0.46 dólares previstos por el mercado.
Hewlett-Packard sube en torno a un 11% en preapertura que obtuvo en su segundo trimestre fiscal (HP) un beneficio neto de 1.077 millones de dólares, un 32.4 menos de los 1593 millones que obtuvo en el mismo período de un año antes.
En el sector financiero, una filial de JP Morgan ha sido multada con 3 millones de libras por la FSA – Autoridad de Servicios Financieros británica- por cometer infracción grave al no proteger el dinero de sus clientes británicos. La filial de la entidad JP Morgan Securities incumplió la legislación vigente en el país al no gestionar de forma separada el dinero de sus clientes y su propio capital entre noviembre de 2002 y julio de 2009, según indica la FSA en un comunicado.